El día que dejó de nevar en Alaska

Autor: ALICE KELLEN
Editorial: Umbriel y Ediciones Urano
ISBN: 9788416327393
Páginas:  352

Sinopsis: 

Un chico con el corazón de hielo. Una chica que huye de sí misma. Dos destinos que se cruzan. Heather cree que solo hay tres cosas que sabe hacer: atraer problemas, salir huyendo y correr. Así es como termina en Alaska, en un pequeño pueblo perdido, trabajando de camarera mientras intenta llevar una vida nueva y tranquila. Su único problema es que uno de los dueños del restaurante parece odiarla y que ella nunca antes ha conocido a nadie que despierte tanto su curiosidad. Nilak es reservado, frío y distante, pero Heather puede ver a través de todas las capas tras las que se esconde y sabe que en ocasiones hay recuerdos que pesan demasiado; como los de sus propios errores, esos que intenta dejar atrás. Pero, a veces, la vida te da una segunda oportunidad. La nieve empieza a derretirse. Y todo encaja.

Sobre Alice Kellen

Alice Kellen nació en Valencia y tiene veintiocho años. Es una joven promesa de las letras españolas que acostumbra a vivir entre los personajes, las escenas y las emociones que plasma en el papel. También es autora de las novelas Sigue lloviendo, El día que dejó de nevar en Alaska y El chico que dibujaba constelaciones, que fueron todo un éxito de críticas. Es una enamorada de los gatos. Y adicta al chocolate y a las visitas interminables a librerías.

Mi Reseña 

Cuando inicie la lectura tenía mis dudas sobre si me iba a parecer tan encantador como a la mayoría de las personas que lo han leído,  creo que tú,  al igual que yo, seguramente lo has visto en muchas partes, inclusive hubo momentos en los que estaba agotado en algunas librerías pero yo no quite el dedo del renglón hasta que lo conseguí y no me arrepiento de haberme aferrado para poder leerlo pues es una gran historia. El libro es adorable, es contado en primera persona por Heather Green, te cuento que desde que había avanzado los primeros capítulos supe que por la manera en la que escribe Alice Kellen se convertiría en una de mis autoras favoritas, y ¡vaya que lo consiguió!

Heather ha cometido errores, se ha hecho daño a si misma al punto de perderse en el camino por lo que de manera inesperada se va sin decir a donde; impulsada por su deseo de reencontrarse o por lo menos dejar de causarle problemas a su familia  decide irse a Alaska, te parecerá curioso pero ha elegido ese lugar por un poster que tenía en su habitación.  En primera instancia es rechazada por algunas personas de Inovik Lake pero ella está decidida a quedarse, así que poco a poco se va ganando su espacio.

Pasa sus días trabajando en el bar Lumini y conviviendo con su vecino John, con quien ha creado un vínculo especial  gracias a Caos, un Husky al que John ha estado tratando de entrenar y quien  aparentemente no logra seguir reglas como el resto de la camada pero que tuvo una fascinación por Heather desde que la conoció y simplemente no se despega de ella.

Por otra parte esta Nilak, un chico retraído y ensimismado, que aparentemente no soporta a su nueva compañera de trabajo (nuestra protagonista) y es por un hecho desagradable para ella lo que los orilla a tener que ser acompañada a casa cada que terminan turno y es precisamente la convivencia del día a día la que hace que se lleven mejor, que Heather le pueda arrancar unas breves sonrisas a Nilak e inclusive comience a entrenarla en canicross.

 Para mí el punto enigmático en la lectura se centra en las páginas del diario de una chica llamada Annie,  las cuales se intercalan entre la historia de Nilak y Heather, donde a través de ellas nos va contando su primer amor con Kayden. No puedo dejar de mencionar a los demás personajes como Naaja , Sialuk o Seth, son encantadores, con sus acciones te logran transmitir la ternura y la unión que viven en Inovik Lake, donde a pesar de ser un lugar extremadamente frio ellos saben hacerte sentir en familia.

Evidentemente Heather y Nilak se enamoran, él deja de luchar  con lo que siente y la deja entrar en su vida de lleno, pero al igual que ella, ambos tienen un pasado, ese pasado que los llevo a encontrarse en Inovik Lake, enamorarse y con ello liberarse de las cadenas que los hacían sufrir. Lo más bonito de la historia es que con su amor no solo sanan sus heridas, también las de John... Seguramente te preguntaras que tiene que ver una persona mayor en todo esto, pero eso es algo que tendrás que descubrir por tu propia cuenta.

Te invito a que leas esta historia de amor y sanación, no te arrepentirás y seguramente terminaras adorando a Caos al igual que Heather.

La frase del libro:

"Su risa es como una lluvia veraniega, de esas que llegan en una tormenta inesperada y te empapan de arriba abajo. Deseo memorizarla, quedármela para siempre."