Autor: Won-pyung Sohn
Editorial: Océano Gran Travesía
ISBN: 9786075573076
Páginas: 256
Editorial: Océano Gran Travesía
ISBN: 9786075573076
Páginas: 256
Sinopsis:
Yunjae nació con alexitimia, una enfermedad que le impide reconocer y expresar emociones, y que está asociada a un crecimiento inferior de la amígdala cerebral, generalmente del tamaño de una almendra. Su madre soltera y su abuela hacen todo lo posible por ayudarlo a relacionarse con los demás, si bien en la escuela se enfrenta a la intimidación y al rechazo de sus compañeros por su comportamiento indolente. Pero un día ocurre la tragedia: en la tarde de su decimosexto cumpleaños, la madre y la abuela de Yunjae son víctimas de un violento ataque callejero que termina con su abuela muerta y su madre postrada en cama en estado vegetativo. Yunjae tendrá entonces que vivir solo y encargarse de la librería de libros usados de su familia.
Won-pyung Sohn obtuvo su licenciatura en Estudios Sociales y Filosofía en la Universidad de Sogang, así como la de Dirección de Cine en la Academia Coreana de Artes Cinematográficas. Ha recibido varios premios y distinciones por su obra cinematográfica.
Su debut literario llegó en 2017, cuando su novela Almendra ganó el Premio Changbi de literatura juvenil y se convirtió inmediatamente en un éxito de crítica y ventas. Su segunda novela, Born in 1988, ganó el Jeju 4.3 Peace Literary Award. En la actualidad, combina su actividad profesional como escritora, directora de cine y guionista.
Mi Reseña
Almendra es uno de los libros que más ansiaba leer en este año y me siento muy afortunada por poder hacerlo.
Este libro tuvo un boom impresionante gracias a que un cantante K-pop lo recomendó (o algo así) pero lo que realmente me hacía desearlo era que tenía muy poco acercamiento con libros asiáticos y quería reivindicarme con los libros de dicha cultura. La verdad es que ni siquiera se puede decir que tenga “experiencia” con los autores asiáticos, simplemente leí a uno y no me gustó su prosa :P pero con Almendra sucedió todo lo contrario, me han nacido unas ganas inmensas por querer leer más libros de dicha cultura, ya sea por sus autores o por la historia.
La sinopsis de este libro podría decirnos mucho, podríamos llegar a creer que lo sabemos todo y que no habrá mucho que nos sorprenda pero no podríamos estar más equivocados. Aun con una sinopsis tan clara, debo decirles mis queridos amigos que no sabemos NADA.
Considero que cuando se trata de libros que hablan sobre algún tipo de trastorno mental se deben de leer y sobre todo reseñar con sumo respeto porque en este tipo de tramas es cuando la ficción se encuentra entre la delgada línea de la realidad, la realidad de alguien en este planeta que llamamos hogar.
Antes de hablarles un poco de la historia, me gustaría destacar la prosa de Almendra. Nos encontraremos con capítulos cortos que fluyen con calma, casi con la misma calma de su protagonista, pero es un flujo constante que converge en un todo que dejará al lector con el corazón en la mano y con una empatía irrebatible.
En cuanto a la historia…
Yunjae no solo no comprende el mundo, él mismo es incomprendido por el propio mundo y se tiene que valer de las enseñanzas de su madre, una mujer sin duda valiente que desde que descubrió la condición de su hijo no se rindió y en medida de sus posibilidades lo educó y le enseñó a subsistir pues la alexitimia no solo se trata de la imposibilidad de percibir y expresar emociones, se trata de adaptarse al mundo porque el mundo jamás se adaptará a ellos, sin importar que eso sea lo correcto, no solo se trata de ser incomprendido y señalado, se trata de carecer de credibilidad por el simple hecho de decir las cosas sin los matices que nos regalan las emociones, hecho que constató Yunjae a la corta edad de 6 años
Pero no solo nos encontraremos con la historia de Yunjae. Si prestamos atención nos daremos cuenta de la necesidad del ser humano por recibir compasión, un requerimiento tan egoísta que no ve más que las necesidades del ser que la está pasando mal y que con toda exigencia pide ser comprendido y compadecido sin importar si el otro está en condiciones de brindar dicha atención. Y con esto no digo que este mal o que tenga que ser crucificado dicho comportamiento, simplemente es un mecanismo del ser humano para expresar su dolor.
Y dicho esto, hablemos de Goni. Un chico que creció sin afecto y que esa misma necesidad lo orilló a ser un niño hostil y un niño “malo”. Un niño malo que por diferentes motivos pero casi de la misma manera que Yunjae, no sabía expresar sus emociones y ni que decir de recibir muestras de afecto. Pero gracias a las ironías de la vida, Yunjae y él se volvieron cercanos, dos jovencitos incomprendidos por circunstancias muy distintas pero incomprendidos la fin.
Creo que sobra decir que disfruté mucho de esta lectura que a pesar de ser bastante corta nos da mucho que aprender.
Sin duda, una lectura recomendada.
"Los libros me transportaban en un instante a lugares donde no podía ir, me transmitían las confesiones de personas que no conocía y me mostraban las vidas que no podía observar de cerca. También estaban repletos de sentimientos que no podía sentir y de expresiones que no había vivido".
Gracias a Océano México Editorial por el ejemplar.
¡Hola!
ResponderBorrarDesde que lo anunciaron como novedad me llamó la atención y no dejo de leer buenas críticas hacia él. Lo tendré en la mira ahora que vengan los ofertones, jaja.
¡Nos leemos!
Holaaaa :) tengo este libro anotado para leer porque he visto mucho sobre la historia que cuenta, así que es definitivo que lo leeré pronto.
ResponderBorrarGracias por tu opinión. Un abrazo ^^!